La Marcha del Maestro: Ocho Pasos Sobre la Muerte

Visualicemos, mis QQ∴ HH∴, el pavimento mosaico. Blanco y negro alternados. En el centro, el cuerpo de Hiram. Y nosotros, aspirantes a Maestro, debemos pasar sobre él. No rodearlo. No evitarlo. Sobre él.

Lavagnini escribe: “Ocho son los pasos de la Marcha del Maestro, por medio de la cual pasa uno sobre la muerte por medio del sacrificio de la Personalidad”.

Esta marcha no es decoración ceremonial. Es un método de transmutación. Cada paso es una muerte simbólica. Ocho muertes para una resurrección.

Geometría Sagrada de la Transformación

El Número 8: Sacrificio como Consagración

Lavagnini aclara: “La palabra sacrificio debe entenderse rectamente en su significado originario: del latín sacrum facere, ‘hacer sagrado’”.

Descodificación: Sacrificio NO es sufrir. Es consagrar. Es hacer sagrado lo profano. Es convertir lo personal en universal.

Inferencia Masónica: El 7 (septenario) es poder en potencia (saber). El 8 (octonario) es poder en acción (hacer). Ya vimos esto en grados anteriores: los Siete Metales, las Siete Artes Liberales. Ahora actuamos sobre esa sabiduría acumulada.

El 8 es también el símbolo del infinito acostado ($\infty$). No es un final, es continuidad eterna. Cada muerte es un renacimiento.

Las Tres Etapas de la Marcha

Lavagnini enseña que la marcha tiene tres etapas mayores. Cada una vence un enemigo específico.

Primera Etapa: Occidente → Sur (Vencer la Ignorancia)

Punto de partida: Occidente (apariencia, dualismo, las dos columnas). Destino: Sur (Luz de la Verdad). Enemigo derrotado: Ignorancia. Sobre el cadáver: Desde la cabeza (conocimiento de la Realidad).

Conexión Masónica: Las dos columnas, Jachín y Boaz, representan dualidad. Partir de ahí significa salir de la apariencia (blanco/negro, bien/mal, yo/tú). Llegar al Sur es iluminación por la Verdad. El Sur es donde el Sol está en su máxima altura, verdad sin sombras.

Enseñanza Práctica: En esta etapa abandonamos las creencias heredadas. Buscamos el conocimiento experiencial. No es que dejemos de creer, es que transformamos la creencia en certeza vivida.

En nuestra vida profana: ¿En qué área todavía vivimos en la apariencia de las cosas? ¿Dónde confundimos forma con contenido? ¿Dónde repetimos opiniones sin verificar? Ese es nuestro Occidente personal. El trabajo es llevar luz ahí.

Segunda Etapa: Sur → Norte (Vencer el Fanatismo)

Punto de partida: Sur (pasión, calor emocional, luz cegadora). Destino: Norte (juicio severo de la mente, frialdad reflexiva). Enemigo derrotado: Fanatismo. Sobre el cadáver: Al pecho y brazo derecho (dominio de impulsos del corazón).

Conexión Masónica: El Sur es calor (pasiones ardientes). El Norte es frío (razón cristalina). Caminar de Sur a Norte significa pasar del sentir ciego al discernimiento lúcido. No matamos la pasión, la dirigimos con inteligencia.

Lavagnini dice: “Dominio que uno adquiere y realiza sobre sí mismo”. Este es el trabajo del Compañero elevado. El Sur nos enseñó a sentir. El Norte nos enseña a pensar.

Enseñanza Práctica: El Fanatismo nace cuando la pasión (Sur) actúa sin el control de la razón (Norte). Un Maestro camina por ambos territorios. Siente con pasión, pero juzga con claridad.

En nuestra vida profana: ¿Cuántas decisiones tomamos desde la pasión (Sur) sin consultar la razón (Norte)? En una discusión familiar, ¿defendemos nuestra posición por sentimiento o por verdad? El Maestro pasa por ambos, no se queda en ninguno.

Tercera Etapa: Norte → Oriente (Vencer la Ambición y la Frialdad)

Punto de partida: Norte (frialdad, control mental, aislamiento). Destino: Oriente (Conciencia de la Unidad del Ser, Amor con Propósito). Enemigo derrotado: Ambición y frialdad implícita. Sobre el cadáver: Pasando por el vientre, pierna izquierda (dominio de instintos primitivos).

Conexión Masónica: El Norte puro puede convertirse en frialdad, en rigidez intelectual, en separación del corazón. El Oriente es corazón iluminado, donde razón y amor se unen. Aquí nace la Vida verdadera. Aquí está el Venerable Maestro.

Lavagnini es muy claro: “Purificación completa de todo egoísmo o Ambición, y de la misma frialdad implícita en el dominio realizado sobre las pasiones”.

Descodificación: El Maestro no es un estoico (frío y desapegado). Es un servidor (cálido con propósito divino). La frialdad del Norte debe calentarse con el Amor del Oriente. Aquí es donde el conocimiento se transforma en sabiduría.

Enseñanza Práctica: La Ambición en el Oriente ya no busca lo nuestro, busca lo universal. No es debilidad. Es fuerza dedicada al servicio. El Maestro que llega al Oriente no abandona su poder mental (Norte), lo consagra.

En nuestra vida profana: ¿Nuestro control es frialdad (distancia, separación) o serenidad (paz con propósito)? La diferencia es crucial: la frialdad separa, la serenidad une. Un jefe frío intimida. Un Maestro sereno inspira.

La Posición Final: Pies en Escuadra Oblicua

El texto dice: “Sus pies juntos, formando una escuadra oblicua, están ahora delante de los pies del muerto, indicando que está destinado a tomar su lugar”.

Descodificación: Los pies en escuadra significan rectitud. Oblicua significa no rígida, flexible, adaptable. El Maestro es recto pero no dogmático. Tiene principios inamovibles pero métodos flexibles.

Enseñanza Clave: No caminamos al lado de Hiram. Caminamos en Hiram. Nos identificamos con el Ideal muerto. Nos convertimos en él. Esa es la resurrección. El Ideal no vuelve a vivir en la forma antigua. Vuelve a vivir en nuestra forma nueva.

Nuestros pies están donde estaban los suyos. No ocupamos su lugar físicamente, ocupamos su función espiritual.

Aplicación Práctica: Vida Profana y Decisión

Ejercicio Semanal: Nuestra Propia Marcha

Tomemos una decisión importante que estemos enfrentando. Tracemos nuestra propia marcha sobre ella:

• Occidente → Sur: ¿Qué creencia heredada tenemos que desafiar? ¿Dónde estamos operando desde la Ignorancia, desde lo que “siempre se hizo así”?
• Sur → Norte: ¿Qué pasión o impulso emocional nos está moviendo? ¿Cómo podemos examinarlo con frialdad sin perder su energía?
• Norte → Oriente: ¿Qué egoísmo debemos sacrificar aquí? ¿Cómo podemos actuar con inteligencia y con amor?

Ejemplo Práctico, Decisión Laboral:

• Occidente → Sur: Creencia vieja: “Necesitamos este ascenso para ser valiosos”. Verdad emergente: “Nuestro valor es interno, no depende de títulos”.
• Sur → Norte: Pasión: “¡Queremos este puesto porque nos daría estatus y reconocimiento!” Razón: “¿Realmente sirve a nuestro propósito real? ¿O solo alimenta nuestro ego?”
• Norte → Oriente: Egoísmo: “Nosotros merecemos esto más que otros”. Amor: “¿Cómo este rol nos permitiría servir mejor? ¿Quién más se beneficiaría?”

La marcha se completa cuando la decisión viene de la Verdad (Sur), guiada por la Razón (Norte), y motivada por el Amor (Oriente).

Aplicación Práctica: La Marcha Mental Masónica

Durante cada tenida, realicemos la Marcha Mental:

Al entrar al Templo, caminemos mentalmente la marcha mientras observamos sus símbolos:

• Al ver las columnas (Occidente): Recordemos que la apariencia es dual (blanco y negro, masculino y femenino, espíritu y materia). Pero la Realidad es Una.
• Al mirar al Sur: Recordemos que la Verdad ilumina, no quema. El Fanatismo confunde luz con fuego.
• Al mirar al Norte: Recordemos que el juicio sin amor es frialdad, muerte del espíritu. La Razón sola congela.
• Al mirar al Oriente (donde está el V∴M∴): Recordemos que ahí nace la Vida. El Venerable Maestro no es un juez distante. Es un símbolo del Principio Creador que ama lo que crea.

Esta marcha mental, hecha con conciencia, es verdadera iniciación. La ceremonia externa solo representa lo que hacemos internamente.

Conexión con Planchas Anteriores

• En la primera plancha vimos cómo los Tres Asesinos matan a Hiram (el Ideal).
• En la segunda plancha reconocimos nuestra complicidad en el Juicio Inicial.
• En la tercera plancha identificamos específicamente cómo operan Ignorancia, Fanatismo y Ambición.
• En la cuarta plancha (esta) aprendemos el método para transmutarlos.

La marcha no es escape. Es transmutación en movimiento. Cada paso es una muerte de lo viejo y un nacimiento de lo nuevo.

Reflexión Final: Ocho Muertes, Una Vida

Mis QQ∴ HH∴, la Marcha del Maestro no se hace una sola vez en la ceremonia. Se hace todos los días en cada decisión. En cada momento donde elegimos entre la Ignorancia y la verdad, entre la pasión ciega y la razón serena, entre el egoísmo y el servicio.

Cada paso sobre el cadáver de Hiram es un paso sobre nuestro propio cadáver. Es la Personalidad que debe morir para que la Individualidad renazca.

El número 8 es doble cuadrado ($\text{4} + \text{4}$): equilibrio perfecto. No nos quedemos en el Occidente (Ignorancia), ni en el Sur (pasión sin dirección), ni en el Norte (frialdad sin corazón). Lleguemos al Oriente, donde el Sol renace cada día.

Esa es la vida del Maestro: nacimiento constante.

Pregunta para reflexión personal: ¿En qué etapa de la marcha estamos parados hoy? ¿Todavía en el Occidente de la Ignorancia? ¿En el Sur de la pasión confusa? ¿En el Norte de la razón fría? ¿O ya comenzamos a caminar hacia el Oriente?

Ese es nuestro GPS interior. Usémoslo.

Que nuestra Marcha sea constante.

Que nuestros pies encuentren el Oriente.

Que la Personalidad sea sacrificada por la Individualidad.